La educación es un ámbito a las que las personas tienen derecho fundamental, el aprender a expresarse de manera correcta, según su idioma original o materno, así como el aprender hacer cálculos y estudiar para una profesión y carrera, que le permitan al ser humano mantenerse y satisfacer sus necesidades básicas principales.
Lastimosamente son muy pocas las personas que tienen acceso a este tipo de educación, son muchas las instituciones benéficas que se esfuerzan por llegar a ese número de individuos que estando o no en edad escolar toman la iniciativa de enseñarles y hacerles más fácil la vida.
Otro factor a tomar en cuenta en este tiempo es el confinamiento al que se ha estado sometido a nivel mundial a raíz de la virulenta enfermedad del covid-19. Las escuelas centrales, publicas y privadas se vieron en la imperiosa necesidad de cerrar sus puertas, al comienzo era como estar atados de manos, sin embargo las alternativas llegaron.
Google y sus aplicaciones educativas accesibles
Con la adquisición de equipos inteligentes la plataforma de Google creó aplicaciones que le permiten a estudiantes, maestros e instituciones desarrollar las clases de manera virtual, la tecnología les permitió a los que tienen acceso a ella, poder continuar de forma efectiva, aunque experimental al comienzo, con las actividades académicas básicas.
La seguridad de los usuarios se ha tomado en cuenta por esta compañía, se han creados formatos de acceso que les permitan a las personas poder realizar sus actividades educativas apropiadamente, es como el cerrajero Manresa que coloca diferentes métodos de seguridad en un espacio, el usuario debe saberlas manejar de forma adecuada.
El esfuerzo bien vale la pena, la adaptación ha sido significativa y eso se valora por parte de todo aquel que ha aprendido a manejar de forma segura y correcta por las aplicaciones que están accediendo al sistema educativo.
El uso acertado de las aplicaciones
El internet, la tecnología de avanzada, las clases virtuales, se han convertido para instituciones, maestros, padres y niños en una forma conjunta de llegar a la mejor y mayor cantidad posible de aprendizaje necesario para el continuo desarrollo intelectual del estudiante.
Todos se han tenido que adaptar, a las circunstancias que se han originado, los maestros a poder transmitir las lecciones a través de diferentes esquemas virtuales, las instituciones a la supervisión de las actividades, al funcionamiento de programas de evaluación online, así como de llevar un orden cronológico de las mismas y los record de cada estudiante.
Los padres y alumnos se han tenido que acoplar a las diferencias de educación presencial y guía de maestros preparados, para ser ellos los protagonistas de seguirle el rendimiento educativo a los jóvenes, es hora de entender toda aquella circunstancias de que las actividades deben tener su orden cronológico y de entrega para el éxito de las mismas.
Todas aquellas aplicaciones que se han generado de forma gratuita para que se ejecuten las actividades educativas son de gran valor para este momento difícil que se vive a nivel mundial, la cuestión está en saberlas aprovechar.